lunes, 27 de noviembre de 2017

NELSON SPECCHIA ( LAS BREÑAS,CHACO,1964)



Una lapicera verde

Cada mañana al borde del cuaderno
donde la pluma registraba el día
frente al curso, los niños y la fría
campana del patio dando el eterno
toque de las horas y los recreos:
Parker verde, verde y esmeralda, delgada
varita para la voz olvidada
que se oculta tras guardapolvos nuevos.
Lapicera de maestra de escuela,
hábito de vocales, redondillas
y renglón completo, hasta las orillas.
Hoy trazas con mi mano, aunque te duela,
versos vanos en hojas amarillas:
no sabrás, pluma, de cosas sencillas.


Una moneda de Diez

Proverbial caballito reducido
Al redondo de níquel de moneda:
Tu porte marcial de plaza va unido
Al general, la sombra y la arboleda.
Pobre dinero de metal bruñido:
un décimo de peso algo pagaba
en aquel pasado que ya es tiempo ido.
Caballito de trote vano, nada.
Pobre corcel militar ya sin honra.
Pretoriano custodio del centavo,
nada queda de tu porte gallardo:
de aquellos trotes no más una sombra;
de los sucios monederos, esclavo;
de las avaras propinas, bastardo.


De mi padre

Cuánto recelé las palabras, Juan,
en las horas que sólo no teníamos
uno al otro, sin lo que más debíamos
mostrar en sociedad. Mis ojos iban
hacia ti, mas mi voz iba al silencio,
sin comprender tu desdicha y el hielo
de los días del deber y el duelo.
Nadie llegó a percibir el cansancio
del rostro serio ni del porte grave,
salvo aquella madrugada de lástimas
en que perdimos la puerta y la llave,
el sentido, el polo norte y las próximas
palabras sin que Madre dé la clave.
Y fue tarde para todas las lágrimas.


de Ritos de paso, Alción Editora, Córdoba, 2017

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